Es probable que a estas alturas todos hayamos oído cientos de veces lo que el bótox puede hacer contra los signos de envejecimiento, pero no es la única aplicación de esta sustancia. La toxina botulínica contra la hiperhidrosis es sumamente efectiva, siendo esa patología ni más ni menos que la sudoración excesiva. Una incómoda situación que no solo afecta a los hombres, sino que también se presenta en las mujeres.

En datos, esta sudoración excesiva afecta a casi un 4% de la población. Una cifra nada despreciable que es muy común en las edades adolescentes y en la primera etapa de la juventud. Una vez se diagnostica, comienza una carrera en busca de soluciones que puedan ser higiénicas y estéticas a la vez.

Los beneficios de la toxina botulínica contra la hiperhidrosis

Antes de meternos de lleno en el tema, huelga precisar que, si la hiperhidrosis es una sudoración excesiva, la toxina botulínica es una neurotoxina que es liberada por el botulismo -una enfermedad- y que se usa con fines médicos.

Respecto de la alteración también hay que saber que existen dos tipos: la primaria, que afecta principalmente a la palma de las manos, axilas o pies, y la secundaria que es devenida por alguna otra enfermedad que puede tener que ver con la diabetes o con el hipertiroidismo, entre otras muchas otras enfermedades.

Bótox como solución para la hiperhidrosis primaria

En el caso de la primaria, esta sudoración interfiere de manera significativa en la calidad de vida de quienes la padecen. La sudoración afecta no solo a las actividades diarias, sino a las relaciones incluso sociales. Imagínate que sudas en exceso por la cara mientras tomas algo con los amigos o en el entorno laboral. Inconvenientes que quedan manifiestos y a los que conviene sumar las rozaduras y los eccemas propios de esta sudoración sin control.

Entre todas las terapias que se conocen, los tratamientos con toxina botulínica son de los más efectivos, especialmente cuando de las axilas o de las palmas de las manos se trata. La toxina botulínica contra la sudoración excesiva permite bloquear la transmisión del sistema nervioso responsable de la patología. Sin apenas efectos secundarios, el bloqueo se produce a los tres o cuatro días tras la aplicación del tratamiento.

Resultados y efectividad del tratamiento de toxina botulínica para casos de sudoración excesiva

La infiltración o infiltraciones de toxina botulínica en las zonas afectadas se realiza con agujas sumamente finas, por lo que se trata de un tratamiento prácticamente indoloro. El tiempo de la sesión es de unos 40 minutos y el de duración del tratamiento de unos seis meses. El bloqueo de las glándulas sudoríparas durante ese tiempo aproximado hace que se trate de una solución asequible y que te ofrece buenos resultados.

Los expertos en medicina estética coinciden en la efectividad de la toxina botulínica contra la hiperhidrosis como una clara alternativa a las prácticas quirúrgicas más agresivas. Padecer esta sudoración y los efectos de la misma no tiene sentido cuando está al alcance de la mano de cualquier paciente este tipo de tratamiento, que en algunos casos llega a durar hasta un año. ¡Entra en nuestra web y consulta este tratamiento!