Cuando decidimos comenzar un tratamiento de depilación láser, solemos centramos en la tecnología, el número de sesiones o el tipo de piel. Sin embargo, hay un aspecto clave que muchas veces pasa desapercibido y que influye directamente en los resultados: las fases del crecimiento del pelo.
Comprender el ciclo capilar es esencial para saber cómo funciona la depilación láser y por qué requiere varias sesiones. De hecho, conocer en qué fase se encuentra el vello permite optimizar cada sesión y aumentar la eficiencia del tratamiento.
Las 3 fases principales del crecimiento del pelo
El vello corporal no crece todo al mismo tiempo ni de forma uniforme. Cada folículo piloso pasa por un ciclo compuesto por tres fases:
1. Fase anágena (fase de crecimiento)
Es la etapa activa del crecimiento del vello. Durante esta fase, el pelo está unido al folículo y recibe nutrientes constantemente. Es la fase ideal para aplicar la depilación láser, ya que el láser puede alcanzar y destruir la raíz del pelo de forma efectiva.
2. Fase catágena (fase de transición)
Aquí el crecimiento del pelo se detiene y el folículo comienza a encogerse. Dura unos pocos días y, en esta etapa, el láser no es tan eficaz, porque el vello se va desprendiendo del folículo.
3. Fase telógena (fase de reposo)
Es la fase final del ciclo. El vello está suelto, ya no crece y finalmente cae para que comience un nuevo ciclo. Aplicar láser en esta fase no tiene efecto sobre el folículo, ya que no hay raíz activa a la que atacar.
¿Cómo afectan estas fases al tratamiento de depilación láser?
El láser actúa únicamente sobre los vellos en fase anágena, porque en este momento están en contacto directo con la raíz. Pero como no todos los pelos se encuentran en esta fase al mismo tiempo, es necesario realizar varias sesiones espaciadas para alcanzar todos los folículos en el momento óptimo.
De ahí que se recomiende seguir una planificación específica entre sesiones, generalmente cada 4 a 8 semanas, según la zona del cuerpo y el tipo de pelo.
¿Cuántas sesiones de depilación láser se necesitan según las fases del crecimiento?
En promedio, un tratamiento completo puede requerir entre 6 y 12 sesiones, aunque este número puede variar en función del tipo de piel, el grosor del vello y la zona a tratar.
Las zonas con vello más denso o grueso (como ingles, axilas o rostro en hombres) suelen necesitar más sesiones. Por eso, la constancia es clave: saltarse sesiones o no respetar los tiempos entre ellas puede reducir la eficacia del tratamiento.
¿Por qué algunas personas no ven resultados inmediatos?
Es común que, tras las primeras sesiones, algunas personas sientan que el tratamiento no está funcionando. Esto se debe a que solo una parte del vello estaba en fase anágena durante esas primeras sesiones.
El láser no elimina de forma instantánea todo el vello: actúa progresivamente, sesión tras sesión, alcanzando cada vez más folículos activos. Por eso es importante tener paciencia y seguir las pautas del profesional.
Consejos para optimizar los resultados de la depilación láser
Para aprovechar al máximo cada sesión y respetar las fases del crecimiento del pelo, ten en cuenta estas recomendaciones:
- Evita la exposición al sol al menos 7 días antes y después de cada sesión.
- No uses métodos que arranquen el vello de raíz, como la cera o las pinzas, durante el tratamiento.
- Afeita la zona a tratar unas 24 horas antes de la sesión (solo si tu especialista lo indica).
- Hidrata bien la piel entre sesiones para mantenerla saludable y receptiva al tratamiento.
- Exfolia suavemente la piel (siguiendo las recomendaciones del centro) para evitar obstrucciones y permitir una mejor penetración del láser.
¿Cuánto tiempo dura el ciclo completo de depilación láser?
Un tratamiento de depilación láser efectivo generalmente consta de 8 a 10 sesiones, con intervalos de 6 a 8 semanas entre cada una. Por lo tanto, la duración total del proceso puede extenderse aproximadamente entre un año y medio y dos años, dependiendo de la zona del cuerpo y las características individuales.
Tras finalizar la fase inicial, algunas personas pueden requerir sesiones de mantenimiento periódicas, ya sean anuales o semestrales, para optimizar los resultados a largo plazo, especialmente en casos de vello persistente o de origen hormonal.
Conclusión: entender el crecimiento del vello, clave para una depilación efectiva
Conocer las fases del crecimiento del pelo no solo te ayudará a entender mejor tu tratamiento, sino que te permitirá tomar decisiones más informadas y realistas sobre los resultados. Saber cómo funciona la depilación láser y respetar el calendario de sesiones es lo que realmente marcará la diferencia.
En nuestro centro, adaptamos cada tratamiento a tu tipo de piel y vello, asegurando que cada sesión esté perfectamente sincronizada con el ciclo natural de tu pelo.
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